La tristeza del gran Teófilo Cubillas, al enterarse de la partida de su compañero y amigo en la Selección Peruana y Alianza Lima. El ‘Nene’ recordó con cariño los momentos compartidos desde sus inicios con la blanquiazul hasta los gloriosos días en con la Bicolor.
Escribe: Mathías Gamarra Gan.
Palabras que salen del corazón y no es un amigo el que partió al llamado de Dios, sino su hermano, aquel amigo con quien compartió inolvidables momentos en los juveniles de Alianza Lima y en la Selección Peruana. Teófilo «Nene» Cubillas, recibió un duro golpe al corazón al enterarse del deceso del gran Hugo «Cholo» Sotil y dedicó unas sentidas y cálidas palabras en sus redes sociales. “Hoy, con el corazón en la mano, me despido de ti, mi querido amigo y hermano del fútbol. La noticia de tu partida ha dejado un profundo vacío en mi alma, y no puedo evitar recordar todos esos momentos que compartimos desde nuestros inicios en los juveniles de Alianza Lima. Juntos, conquistamos dos campeonatos invictos en 1964 y 1965, uniendo nuestras vidas en una amistad que trascendió el tiempo y la distancia”.
Luego el goleador de Perú en los Mundiales, con diez tantos, aseveró: «Tu trayectoria fue verdaderamente impresionante. Desde tus días en el Deportivo Municipal, donde te convertiste en un ídolo, hasta tus exitosos pasos en el FC Barcelona de España, donde dejaste una huella imborrable. Siempre admiré tu talento y dedicación, y tu éxito en Europa fue un motivo de orgullo para todos nosotros”.
El «Nene» tiene buena memoria y recordó uno de los pasajes más importante en la carrera de Sotil. “Uno de los capítulos más memorables de nuestras vidas fue el de los Mundiales de 1970 y 1978, donde juntos llevamos la camiseta de la selección peruana y escribimos la historia del fútbol en nuestro país. En cada partido, luchamos codo a codo, llevando a Perú a la escena mundial, y esos momentos de gloria siempre permanecerán grabados en mi memoria”.
Y como recordar es volver a vivir, añadió: «Otro momento singular e inolvidable es tu gol ante Colombia y la Copa América que logramos para nuestro querido Perú en Venezuela 1975”.
Y los recuerdos del «Nene» afloraban: «Recuerdo con especial cariño el viaje que hicimos a Ica hace tres años para conocer al Señor de Luren. Ese viaje fue un regalo, una celebración de nuestra hermandad y de todo lo que logramos juntos. Estoy profundamente agradecido por cada instante que compartimos”
Al finalizar, dijo: “Hugo, tu legado vivirá en el corazón de todos los que tuvieron el privilegio de conocerte. Te extrañaré profundamente, pero sé que siempre estarás presente en cada partido, en cada gol y en cada recuerdo que creamos juntos. La amistad que forjamos nunca se apagará. Descansa en paz, querido amigo. Siempre te llevaré en mi corazón”.
Aldo Torres